“El Continente está
definido por el Contenido”.
Si fueseis capaces de distinguir cuerda y
sabiamente este principio os daríais cuenta “qué tenéis ante vosotros”.
Las frecuencias emitidas están en relación al
emisor y en concordancia necesaria con el emitente, porque es verdad que nunca
puede ser mayor la frecuencia si el emitente es inferior a la frecuencia
emisora. Por tanto es verdad que el emitente no puede emitir más de su potencia
aceptable y estipulada según un Código Superior instaurado por la Justa Balanza
del Debe-Haber.
Esto viene marcado por el Destino, siempre en
continuo balanceo.
Esto es lo que aún debéis perfeccionar en
vuestra vida cotidiana en donde os encontráis innumerables emisores y
emitentes, en donde os encontráis innumerables continentes y contenidos.
La Naturaleza del Contenido es conocida por el
Continente, que a él se entrega: Esto se llama Conciencia, porque es el
depósito indestructible que porta el Contenido y que el Continente puede, si
permiso tiene para ello, de usar.
Pero, debéis aún aprender a discernir entre
Contenido + y Contenido -.
Cuando cambia la polaridad cambia el
Contenido, y el Continente se halla a merced de la Sagrada e Inviolable Ley del
Libre Albedrío: Aceptar o Rechazar.
Por eso se ha dicho: “O con Dios o contra Dios. No existe la senda intermedia”.
Paz
Vuestro amigo, El Ancestral Reunificador, de
sus memorias de “Asclepios”.
Antonio Pastor L.
Vellisca, ..... horas del 29 septiembre 2017.
