¿De qué sirve enfrentarse a la intransigencia o a los intransigentes?
¡No sirve de nada!
Solo sirve al mal disfrazado de bien, que pretende agotar
vuestras energías en discusiones inútiles y contraproducentes.
Los debates en mi mundo son debates iluminados,
unos más y otros menos, pero siempre iluminados y exentos de acaparamientos
abusivos y egoístas de Aquella Esencia y Realidad que ES.
La intransigencia no existe, existe el
respeto, porque todos sabemos que todos representan una parte, POSITIVA, de
aquella Realidad Deificante que el Creador dona y otorga a Sus Criaturas que
desean, sin estímulos negativos, crecer en el conocimiento, en la sabiduría
apoyada en la Suprema Cordura y Prudencia Cósmica.
Es por esto, que ya no pierdo el tiempo con la
intransigencia que algunos ejercen muy sutilmente con palabras y frases que son
disfraces.
Es por esto, que así me siento más libre, y
más ágil para darme a los demás y para no imponer nunca, solo ofrecer.
Quien quiere tomar, toma, quien no, no. Solo los intransigentes pierden el tiempo en
discusiones inútiles.
La Verdad en sí misma no discute, sabe bien
quién es, de dónde proviene, y para que está.
Nada más quería decir.
Fraternamente, un amigo, un hermano, vuestro,
o como deseéis definirme. Mi realidad no cambia.
Antonio.
Vellisca, ..... horas del 26 agosto 2017.