¿Me odian
y desprecian?
¿Me odian, porque yo amo con un amor diferente a lo que
se entiende por amor?
Un amor que no se casa con nadie cuando está delante la
Ley de Dios.
¿Me odian porque digo las cosas tal como suceden, y tal
como han sucedido para hacer meditar que la Salvación es una cruz que cada uno
debe llevar por sí mismo?
¿Me odian y me desprecian porque digo que nadie salva a
nadie, sino que somos nosotros los que, realmente, nos salvamos a nosotros
mismos por las obras, las palabras y los pensamientos que generamos?
¡No es nuevo esto! ¡Ya lo sabíais!
¿Por esto me odian y me insultan tratándome como un
apestado mental?
¿Qué he hecho yo de malo hacia vosotros? ¿Decir la Verdad
de las situaciones vividas que os puedan hacer reflexionar que está en juego
nuestro propio Ego-SUM, nuestro propio Espíritu individual, porque los Seres de
Luz (en los que pocos creen) son Gobernadores y Patrones absolutos de la Vida y
de la Muerte?
Si es por todo esto que me odian, me desprecian, me
insultan, me persiguen insistentemente por lo que escribo en nombre de Otro que
pocos conocen, me ridiculizan a todos los niveles para evitar que los demás
mediten deduzcan y se liberen de las cadenas que otros les ponen y que son
invisibles pero muy difícil de quitar, si es por todo esto, estoy completamente
tranquilo y en la completa humildad de que tan poca cosa como soy, he logrado
tocar el corazón de aquellos que en lugar de decir “Sí por Sí” y “No por No”,
han actuado contrariamente, diciendo “Sí por No” y “No por Sí”.
Y no es que lo diga yo, ¡¡son las obras y los hechos, a
la par que las palabras que dicen las que os lo demuestran!!
¡¡Allá vosotros si no lo creéis!!
Yo no tengo ninguna intención de imponeros nada, pero sí
de advertir que los tiempos aún no se han terminado, y que la Selección del
Padre está y estará en acto, hasta que ÉL decida. ¡¡ES LENTA PERO INEXORABLE!!
Y no penséis por un solo instante que vosotros estáis
fuera de dicha Selección, porque no es así. Girar solo un poco la cabeza
mirando hacia atrás, y os daréis nítidamente cuenta de ello.
Por decir todas estas cosas, y respetar hasta el límite
que puedo la Palabra Escrita procedente del Verbo Solar, soy maltratado. Nada
me asusta, pero soy consciente de que me debo proteger por Amor al Señor Supremo
de este Sistema Solar y del Planeta Tierra. Os aconsejo, fraternalmente, que
también vosotros os protejáis porque solo vosotros seréis vuestros Jueces,
benévolos o no, en el Día del Cumplimiento de la Sentencia. Una Sentencia
dictada por Dios para esta generación que ya no tiene vuelta atrás.
Me odian, me desprecian, me insultan, me denigran, me
ridiculizan, y hacen que los demás se comporten de igual modo, pero no me conocen, solo conocen una parte y es aquella que tiene la
fuerza de hacer salir de sus guaridas a los lobos famélicos sedientos de sangre
y de entrañas; sedientos de la sangre y de las entrañas de la propia Luz
que se manifiesta para advertir, de nuevo otra vez, que aunque no creáis LA LEY EXISTE.
Me odian porque les digo claramente: “Decís de amar al
Maestro de los Maestros, y a Su Mensajero Real, pero os comportáis
contrariamente a Su Ley que es la Ley del Padre/Madre DIOS”.
Por esto me persiguen.
Está bien, Padre Mío, si esta es tu voluntad la acepto
sabiendo que regresaré más limpio de lo que vine.
¡Amén!
Vuestro, Antonio.
Vellisca, ..... horas del 23 junio 2017.